miércoles, 17 de enero de 2018

Carrera de Caballos


Juego de mesa muy popular en la década de 60 y comienzos de los años 70, estaba compuesto por una tablero ilustrado con la imagen de un hipódromo, cuatro caballos de diferentes colores y dos dados.

La mecánica del juego era muy simple, los jugadores (2 a 4) escogían su respectivo caballo y lo colocaban en el punto de partida, línea del tablero marcada como 0.



A continuación, sorteaban la partida y comenzaban el juego lanzando el dado alternadamente, avanzando de acuerdo a las cifras obtenidas. Durante la carrera, los jugadores además de respetar su respectivo carril, debían sortear una serie de obstáculos señalados en el tablero, algunos de los cuales incluso hacían volver a los jugadores al punto de partida.

Resultaba ganador el jugador que alcanzaba o sobrepasaba el casillero 85 señalado como meta.

"Derby Day", "Hipódromo" o "Carrera de Caballos", fueron algunos de los nombres con los que numerosas empresas editoriales comercializaron este juego.